Estos últimos días, añadido a todos mis intereses creativos, me rondaban los bordados... vi bordados maravillosos de una chilena en California, a través de una australiana conocí el trabajo admirable de un guapo de Brooklyn que cose y borda a mano, y que me llevo a un sitio de gente que colecciona ropa tradicional japonesa antigua, cocida y remendada a mano, y un tutorial para una bolsa escolar de una española me daban vueltas teniendo ganas de hacer algo, algo... y la motivación llegó por el costado, de soslayo decimos por acá. A través del encargo que me hizo una compañera de trabajo, quien me pidió un regalo de cumpleaños para una amiga, básicamente Vanessa quería que le ilustrara un pocillo de cerámica a su amiga Loreto, y que me encargara de su embalaje también.... añadió es arquitecto, le gusta subir cerros, los colores básicos y tiene el pelo ondulado!!!!! Entonces aproveché mis ganas de cocer-bordar a mano y le hice una bolsa acolchada como envoltorio a la cerámica.
Esta noche por acá hay tres personas felices: quien recibió un regalo, quien lo dio, y quien lo hizo, otra conexión!!!